La crisis sanitaria ha duplicado el riesgo de alta tensión laboral, una situación que relaciona las obligaciones del puesto de trabajo con la autonomía de la persona empleada, y que multiplica el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares o mala salud mental. Los cambios organizativos y una menor carga de trabajo ayudarían a disminuirla, pero de nuevo se está optando por reducir plantillas y reproducir una división jerárquica que los investigadores consideran arcaica. Reciente investigación Condiciones de trabajo, inseguridad y salud en el contexto del Covid-19 (COTS), realizada por la UAB y el ISTAS CCOO. Según la última Encuesta europea sobre las condiciones de trabajo, de 2015, España era el país en el que la contratación temporal era más frecuente. “Somos las manos de Europa, no la cabeza”. “La clase empresarial española aspira a competir con Pakistán, no con Alemania”.
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